Miles de personas en Hong Kong han rodeado la sede de la policía, pidiendo que se deseche un proyecto de ley de extradición.
La policía ha pedido a los manifestantes que se retiren pacíficamente, diciendo que su presencia «afectaría seriamente» a los servicios de emergencia.
Millones de personas han marchado en contra del proyecto de ley en las últimas semanas, con violentos enfrentamientos con la policía.
El proyecto de ley, que permite la extradición a la China continental, ya ha sido suspendido.
Los críticos dicen que erosionaría la independencia judicial de Hong Kong.
Hong Kong forma parte de China desde 1997 bajo el principio de «un país, dos sistemas», que le permite libertades que no se ven en la China continental.
La protesta se produce un día después de que el gobierno ignorara la fecha límite fijada por un grupo de estudiantes de varias universidades de Hong Kong, que pidieron que el proyecto de ley fuera completamente desechado.
Temprano en la mañana del viernes, la gente se reunió frente al Complejo del Consejo Legislativo, o la sede del gobierno, pero luego se trasladó para rodear la sede de la policía.
Entre los manifestantes se encontraba el activista estudiantil Joshua Wong, que se convirtió en el rostro de las protestas a favor de la democracia en 2014. Fue liberado a principios de esta semana después de haber sido encarcelado en mayo por cargos de desacato relacionados con las manifestaciones de 2014.
En un tweet el viernes, el Sr. Wong pidió a la policía que retirara los cargos contra las personas arrestadas en las recientes protestas.
Más tarde ese mismo día, algunos manifestantes también se trasladaron a la Torre de Ingresos de Hong Kong. El Departamento de Trabajo dijo que varios servicios basados en el edificio se suspenderían por la tarde.